domingo, 13 de noviembre de 2016

Nunca se sabe

"Mis padres fallecieron cuando tenía unos diez años.  Nadie me consoló por dos razones: la primera, porque nadie me conocía, la segunda, porque no lo necesitaba. Al enterarme me sorprendí, pero no lloré. Recordé que no hacía mucho había leído en un libro que llorar era una manera de expresar alegría, rabia o tristeza. En ese momento no sentía ninguna de ellas, por lo que creí que era inútil expresarlas."
"Cuando sólo tenía unos cuantos meses, mis padres me llevaron a una casa en el campo, lejos de la ciudad y de la civilización. Durante los primeros años de mi vida en los que aún dependía de ellos, mis padres se encargaban de satisfacer mis necesidades alimentándome y cuidando de mí, pero siempre intentaban no cogerme mucho en brazos, manteniendo cualquier tipo de contacto conmigo al mínimo. No transmitían ningún sentimiento de afecto o cariño hacia mí, y no dudaron en irse cuando ya podía arreglármelas solo. A veces venían a visitarme para asegurarse de que no estaba enfermo y de que vivía en buenas condiciones, pero al cabo de unas horas se marchaban sin decir nada. Cuanto más tiempo pasaba, menos frecuentes eran sus visitas hasta que un día se fueron y no volvieron. Después de dos años, me enteré de su fallecimiento."

"¿Te acuerdas de cómo eran tus padres?"

"No. La verdad es que no me acuerdo de muchas cosas sobre ellos. Ni siquiera sé la causa de sus muertes. Nunca me hablaban de ellos, así que la mayoría de cosas que no recuerdo son las que nunca supe."

"¿Crees que tus padres te querían?"

"No lo creo. Y si me querían, nunca lo demostraron."

"Incluso te abandonaron y todo."

"Nunca lo consideré como un abandono, ya que me sentía más cómodo solo. Cuando no estaban no tenía que aguantar su constante rechazo. Casi nunca hablaban o, como he dicho antes, mantenían cualquier tipo de contacto conmigo. En realidad me hicieron un favor al irse. Al verlo como algo positivo, nunca identifiqué lo ocurrido como un abandono. Pero ahora que lo dices, podría haber sido eso."

"En realidad lo fue. Tus padres te abandonaron porque le tenían miedo al fracaso y a sus consecuencias."
"No creo que lo supieras, pero tus padres eran científicos. Estaban especializados en el comportamiento humano y estudiaban cómo éeste se veía afectado por el medio en el que se hallaba y sus alrededores."
"En algún momento se les ocurrió llevar a cabo un experimento para estudiar los efectos en el comportamiento humano infantil, por lo que decidieron adoptar un niño. Lo alejaron de los demás, dejándolo solo en una casa en el campo."
"Un psicólogo que formaba parte del equipo encargado de este experimento empezó a dudar sobre si era lo correcto llevarlo a cabo. Resultaba claro que podía analizar la situación desde distintos puntos de vista: el niño y su futuro se verían definitivamente influenciados por el experimento, es decir que el niño sufriría gravemente. Si el niño sufría, se perdería el apoyo de la gente y de la empresa que les abastecía con el dinero suficiente para realizar el experimento. Si además no obtenían resultados satisfactorios, sus futuros serían los que se verían perjudicados. Aún así, tus padres decidieron seguir adelante con el experimento."
"Tus padres no murieron. Se inventaron sus muertes para quitarse un peso de encima. Lo que sucedió fue que se dieron cuenta de que el experimento no les daría los resultados que esperaban y que iba a ser un fracaso. En vez de sufrir las consecuencias de sus actos decidieron marcharse después de mentirle a la gente sobre sus muertes y de enviarte la carta que decía que habían fallecido. No le dijeron a nadie tu localización por miedo a que dijeras dieras información del experimento que no había sido transmitida a la gente ni a la empresa, dejándote así solo."
"Gracias ha ellos te has visto perjudicado durante toda tu vida. Ahora que éesta ha finalizado, no tienes nada que perder. ¿No te gustaría vengarte? Deberías saber que ellos, al final, han sido los que menos han perdido y los que se han visto menos afectados de todos, ¿no les odias por lo que te hicieron?"

"Nunca sabré lo que podría haber obtenido si no fuera por ellos, pero tampoco sabré lo que he conseguido gracias a ellos ya que sóolo he vivido una vida y sólo he experimentado la que es influenciada por ellos. A lo mejor me hubiera perjudicado más no ser adoptado por ellos. Nunca se sabe."
"Ya que nunca salí de esa casa, no importaba mucho mi carácter porque no me tenía que comunicar con nadie. No me sentía solo porque sabía que algún día no lo estaría. Además, nunca me sentí arrepentido ni furioso de ser como soy. Tengo mis cosas buenas y malas, pero no me importa ser como soy. Lo que me importa es ser feliz, y durante estos últimos años, aunque en soledad, he sido feliz a mi manera. Estar solo no tiene por qué ser siempre algo negativo. Si no me odio a mí mismo, ¿por qué debería odiar a los que me hicieron ser así? En todo caso debería estarles agradecido por no haberme  hecho ser alguien que no me hubiera gustado ser. Admito que nunca los he querido y nunca los querré, pero tampoco los he odiado y nunca los odiaré.


Sara Cantallops Jiménez 4º ESO A

1 comentario:

  1. Me ha gustado mucho la primera parte. A partir de la entrevista y del planteamiento del experimento la historia pierde fuerza. Los efectos del desamor y del abandono en un niño son de por sí más interesantes que el resultado de un trabajo científico. Pero, en general, el relato está bien desarrollado.
    Las normas actuales de la Academia, señalan que no se acentúan ni los pronombres demostrativos ni "solo", aunque sea un adverbio de modo.

    ResponderEliminar

Gracias por participar en esta página.