martes, 8 de noviembre de 2016

Bárbara Briano
Dulce 
1 de noviembre de 2016


                      De viaje a Bélgica 
     
Antes de empezar el viaje pensé que Bélgica no iba a ser muy bonito, es decir, pensaba que iba a ser como todos los lugares en los que ya había estado; pero resultó todo lo contrario, me pareció super tranquilo y muy “mágico”.
Al llegar a Brujas nos dirigimos al hotel a dejar las maletas y a descansar un poco, porque nos habíamos despertado a las 6:00 de la mañana y estábamos agotados. Más tarde cuando ya habíamos descansado, fuimos a alquilar unas bicis para ir por el centro, ya que todo el mundo allí la usa. Cuando por fin teníamos las bicis nos pusimos en marcha y fuimos por un camino que pasaba alrededor de un canal, y que había unos árboles enormes con hojas de colores otoñales y también caían las hojas con la brisa del aire y se podía respirar paz y tranquilidad. Cuando llegamos al centro atamos las bicis y fuimos a dar un paseo caminando, pasamos por los canales y por un momento nos olvidamos de la hora que era, ya era la hora de comer y fuimos aun restaurante italiano, ya que nos encanta la pizza y teníamos monoganas de comida italiana; al terminar nos quedamos sentimos llenos y fuimos a dar un paseo para bajar la comida. Después de un rato volvimos a por las bicis, fuimos a una tienda de regalos y compramos imanes y unos parche; así empece mi colección de parches. Cuando acabamos volvimos al hotel recogimos un poco todo, nos aseamos, etc. Y nos quedamos dormidos después del largo e intenso día.
Al día siguiente estuvimos pensando si ir a Damme o a Gent y resultaba claro que podíamos analizar la situación con diferentes puntos de vista, uno era ir a Damme y como es pequeño luego podríamos ir a Brujas y ver lo que no nos dio tiempo a ver ayer el día anterior o ir a Gent y pasar el día ahí, así que nos decantamos por la segunda opción, después de una gran discusión. Al llegar a Gent me encantó, me pareció el sitio más bonito que había visto en mi vida, es era como un cuento, y super muy romántico, un sitio perfecto para ir con tu pareja. Después de que mi hermana y yo nos hiciésemos como mil fotos, fuimos a comer a un restaurante típico de cerveza, que a mis padres les apetecía. Estuvimos dando más vueltas, entramos en el castillo, etc. Cuando ya vimos todo lo que pudimos, fuimos un poco de tiendas y compramos unos regalos y parches??; y ya volvimos al hotel a dejar las cosas y como era la hora de cenar, ya nos acercamos a un restaurante que había cerca del hotel, cenamos y después pasamos por un supermercado para comprar unos bollos típicos y nos fuimos a dormir. A la mañana siguiente volvimos a el al supermercado y compramos productos que no hay en Inglaterra y como aceite de oliva virgen extra y cosas del estilo, más tarde fuimos a dar una vuelta a Damme como acordamos ayer el día anterior y también me encanto me pareció muy rústico y muy familiar. También vimos un molino que estaba a el al lado de un canal y quedaba presentaba una imagen preciosa y como no es era muy grande lo terminamos de ver muy rápido. Al anochecer fuimos hacia el Ferry y, con mucha tristeza, dijimos Adios adiós a Bélgica.

Mi conclusión es que para conocer un lugar hay que ir y no tienes que juzgarlo antes de conocerlo y que muchas veces te puede impresionar. 

1 comentario:

  1. La historia narrada carece de interés. Es un mero recorrido sin ninguna trascendencia, ni situaciones interesantes, por Bélgica.
    Cuida la ortografía: no utilizas "al" cuando se trata de una contracción de a+el. Mezclas tiempos verbales y utilizas un registro vulgar, con expresiones como "súper", "mono" y "etc." cuando no son selecciones adecuadas de vocabulario.

    ResponderEliminar

Gracias por participar en esta página.